El grado de peligro aumentó considerablemente a finales de abril para los cristianos asirios aislados en el noreste de Siria, atrapados desde hace casi tres meses entre las milicias kurdas y las fuerzas armadas sirias que luchan con los militantes del Estado Islámico autoproclamado por el control de la provincia de Hassaka.
“Estamos pasando por un momento terrible”, dijo el arzobispo sirio Jacques Behnan Hindo a Fides News el 30 de Abril. “Los yihadistas del Estado Islámico atacaron a Hassaka durante dos días. Fueron rechazados por el ejército sirio y las milicias kurdas. Pero estamos aislados, como en una isla rodeada por yihadistas por todas partes.”
El Estado Islámico había expulsado a unas mil familias asirias de sus hogares a lo largo del río Khabur a finales de Abril, obligándolas al exilio en Qamishli y la ciudad de Hassaka.
Además, 242 cristianos asirios secuestrados durante los ataques aún están siendo retenidos incomunicados, según los últimos informes están en al-Shaddadi, una plaza fuerte de ISIS bombardeada por el ejército sirio la semana pasada. Representantes oficiales de la iglesia identificaron a todos los rehenes: 93 mujeres, 51 niños y 98 hombres.
Pero después de dos meses de negociaciones no oficiales a través de intermediarios locales, los intentos de la iglesia de conseguir que ISIS liberase a los rehenes resultaron vanos.
Según el arzobispo australiano Mar Meelis de la Iglesia Asiria del Este, quien habló con Newsweek el 1 de Mayo, los yihadistas de ISIS exigieron un rescate de 23 millones de USD, es decir unos 100.000 USD por cada rehén, como condición para liberar a los secuestrados de Khabur. Los militantes describieron el rescate como yizya – un pago que la ley islámica exige a los no musulmanes que se niegan a convertirse al islam.
En respuesta a esta exigencia, un líder de la iglesia asiria dijo a World Watch Monitor: “Este importe está muy lejos de la capacidad de una iglesia y comunidad pequeñas. Los secuestrados son gente pobre que dependen de sus bajos ingresos como agricultores”. La contraoferta de la iglesia, según el clérigo “una cantidad razonable que las familias se pueden permitir”, fue rechazada, dejando las negociaciones en un punto muerto.
El pasado 23 de Marzo se publicó un vídeo de ISIS que mostraba a uno de los rehenes asirios recitando la “shahada” musulmana, o declaración de fe, y diciendo que se había convertido al islam voluntariamente “sin presión alguna”.
“Sí, este hombre llamado Sargon se convirtió en musulmán por unas pocas horas para salvar su vida y ser liberado,” dijo un clérigo asirio a World Watch Monitor. “Ahora está de vuelta en Qamishli, donde se está discutiendo acerca de su comportamiento. Así que esto es en realidad lo que hizo.”
El obispo Yatron Koiana de la Iglesia Asiria del Este en Beirut estudia las solicitudes que llegan constantemente de los cristianos asirios de Hassaka, Siria, pidiendo un visado libanés. – World Watch Monitor
Mientras los cruentos combates por tierra continuaban en Marzo y Abril, docenas de familias asirias desplazadas empezaron a huir de Hassaka para establecerse fuera del país. Al menos 300 familias han llegado a Beirut, donde el gobierno libanés ha concedido visados de 6 meses a cristianos asirios de Hassaka que los soliciten a través de la iglesia. Otros escaparon a campos de refugiados cruzando la frontera con Irak cerca de Dohuk.
“La situación en Hassaka es mala, y muy delicada,” dijo el archimandrita Emanuel Youkhana de la Iglesia Asiria del Este a World Watch Monitor. Los enfrentamientos están ahora teniendo lugar cerca de las afueras de la ciudad de Hassaka, donde está la sede de los arzobispados de la Iglesia Asiria del Este y de la Iglesia Siríaca. Dijo que sólo quedan unas 800 familias cristianas en la provincia.
“Los cristianos asirios se enfrentan a un peligro que amenaza su existencia en sus regiones históricas,” dijo Youkhana al Subcomité para los Derechos Humanos del Parlamento Europeo en Bruselas el 23 de Abril.
No sólo está Hassaka bajo el control de grupos islamistas armados, dijo, sino además los asirios están siendo manipulados por el régimen de Assad, que se presenta como la única alternativa para proteger a las minorías religiosas amenazadas de Siria. Como una antigua iglesia de rito oriental, los cristianos asirios tienen vínculos étnicos con los cristianos siríacos y caldeos de Turquía e Irak.
Los intensos combates a principios de mayo se seguían desarrollando en torno a la ciudad estratégica de Tel Tamar, donde los milicianos kurdos y cristianos asirios malamente armados están pasando apuros y son superados en número. “Estamos rodeados por tres lados”, dijo un francotirador de la milicia a un reportero de Deutsche Welle el 5 de mayo – desde su posición sobre una colina con vistas a Tel Tamar. “Si ISIS quiere avanzar para tomar la ciudad, probablemente lo conseguirá.”
El futuro de los cristianos de Hassaka se estaba volviendo cada vez más precario desde que la revolución de Siria diera un giro abierto hacia el islamismo en 2013, una vez que el régimen de Assad había retirado la mayor parte de sus fuerzas armadas del noreste de Siria. Jabhat al-Nusra, grupo afiliado a Al-Qaeda, tomó inicialmente el liderazgo de entre una multitud de grupos rebeldes islamistas que competían entre sí por controlar Hassaka, sólo para ser marginado después por las fuerzas de ISIS que dominan la provincia desde julio de 2014.
Un médico asirio que trabaja en un hospital del gobierno en Qamishli dijo a World Watch Monitor a finales de Marzo que no se podía confiar en ninguno de los bandos que luchan por el control de la provincia de Hassaka. “No me fío de ninguno de ellos. Está claro que hay coordinación entre ellos. Todos están en contacto con los contrarios. ¿Y quién gana? La industria armamentística”, dijo.
En Beirut, el obispo Yatron Koliana de la Iglesia Asiria del Este coincide con tristeza. “Estamos ayunando y orando para que los gobiernos del mundo no den armas o facilidades a ISIS y sus aliados”, dijo a World Watch Monitor. ”A veces tenemos la sensación de que los cristianos de aquí están siendo vendidos por petróleo y gas. Así que suplicamos que oren para que los grandes tomadores de decisiones tengan misericordia en sus corazones para salvarnos”.
“Cualquiera de los bandos que luchan aquí podría parar esto,” dijo el médico. “Pero no quieren hacerlo – lo que quieren es sacar a todos los cristianos de aquí. Turquía también tiene su mano en esto. Sin cristianos, esto será como Afganistán.”
Fuente: World Watch Monitor
