Judah Smith y su megaiglesia Churchome enfrentan una demanda por exigir que sus trabajadores diezmen el 10% de sus salarios, violando dos leyes del estado de Washington.
Rachel Kellogg, productora de posproducción en Churchome, presentó la demanda el pasado martes en el Tribunal Superior del condado de King en el estado de Washington.
En la demanda señala que Churchome la contrató como asistente de producción indicando que ni en el anuncio de empleo, ni durante el proceso de selección se le mencionó que los empleados debían reembolsar el 10% de sus salarios brutos a la iglesia.
La empleada afirma se enteró de esta política en abril del 2020 durante una videoconferencia interna con el personal. Allí el pastor Judah Smith, “recordó” a los empleados que Churchome exige que los empleados diezmen el 10%. El pastor indicó que la iglesia había despedido ya a varios empleados por este motivo que para ellos era un tema crucial incluso es más importante que recibir la santa cena.
La empleada temía que la despidieran y comenzó a diezmar. Sin embargo, poco después sufrió un accidente automovilístico que destruyó su automóvil y la dejó gravemente herida. Por este motivo tenía que gastar en tratamientos médicos. También tuvo que cubrir los gastos de cambio de domicilio tras el vencimiento de su contrato de alquiler. Kellog señala que continuamente recibe presiones para que vuelva a diezmar amenazando que sería despida.
La demanda
En la demanda los abogados indican que esta Churchome viola la Ley de Reembolso de Salarios de Washington. Esta ley prohíbe que se cobre a un empleado por “reembolso parcial de su salario”. Alegan también que también viola la Ley de Protección al Consumidor de Washington, que prohíbe “actos o prácticas desleales en la realización de cualquier actividad comercial”. Mencionan que la iglesia no advierte de esta política ni en los anuncios de empleo ni en los contratos y mencionan tener pruebas de mensajes de amenazas de despido.