Una corte del norte de China ha sentenciado a cinco líderes de una igleisa no autorizada por el gobierno a 7 años de prisión bajo cargos de reuniones ilegales.La senteicia ha sido una de las más duras en los últimos años ya que los miembros de las llamadas “iglesias caseras” se niegan a registrar sus congregaciones y a aceptar la autoridad de la Oficina de Asuntos Religiosos.
Los arrestos ocurrieron el pasado 13 de septiembre cuando la policía ayanó por sorpresa un servicio en un hogar de la iglesia Linfen Fushan
Church que cuenta con 50 mil miembros al norte de la provincia de Shanxi.
La sentencia mayor cayó sobre el pastor Wang Xiaoguang y paras su esposa Yang Rongli con 7 años de prisión. Otros de los miembros que han sido arrestados fueron condenados a 3 o 4 años de cárcel.
El juicio se realizó rapidamente y sólo se permitió que un miembro de la familia de cada sentenciado pudiese asistir. La policía también impidió que los abogados se reuniesen previamente con los acusados.