Mientras se realizaban excavaciones arqueológicas cerca de la Puerta de Zion en la parte antigua de la ciudad de Jerusalén, se encontró un vaso de 2000 años que fue utilizado para ritos de purificación.
El singular vaso hecho de piedra caliza tiene inscrito un texto de 10 líneas y según el Dr. Shimon Gibson, arqueólogo que dirige la expedición, este es un hallazgo significativo y sin precedentes.
"Este tipo de vaso fue utilizado en los ritos de purificación que se hacían en el Templo, y suelen encontrarse en abundancia en las zonas donde vivían los sacerdotes" manifestó Gibson. "Hemos encontrado una docena o más estos lugares en los últimos tres años. Sin embargo, el tener diez líneas de texto es algo que no tiene precedentes. Generalmente suelen tener la inscripción de un sólo nombre inscrito, en una línea o dos, pero este es el primer vaso que tiene una inscripción de semejante tamaño", acotó.
A pesar que las letras se pueden percibir con facilidad debido al estilo de la escritura los expertos tardarán algún tiempo en descifrar su significado. Gibson ha manifestado que podrían emplearse casi 6 meses para ello pues "está escrito en letra cursiva que es algo muy informal y es muy difícil de leer", explicó.
En la excavación también fue encontrada media docena de conchas de caracoles Murex los cuales están taladrados. El encontrar estas conchas da indicios que el lugar era una zona donde habitaban sacerdotes.
Los caracoles Murex fueron cultivadas en la ancianidad en los pueblos del Mar Mediterráneo. El mucus procedente de la glándula hipo branquial de dos especies, Murex brandaris (cañadilla) y Murex trunculus se empleaba en la elaboración del Púrpura de Tiro o Púrpura real, un tinte usado en prendas de la realeza. Según algunos expertos, este tinte se utilizaba para la ropa sacerdotal y en borlas en la vestimenta usada por todos los judios de la época basándose en el tekhelet bíblico descrito en Números 15:38-39.