Antes de comenzar a dar un vistazo a la historia de la adoración congregacional, deberíamos hacernos la siguiente pregunta ¿Para qué molestarse en hacer esto? Después de todo Dios no le ha dado a cada generación un canto particular? En muchas de nuestras iglesias el canto congregacional ha estado sometido a una revolución desde hace unos pocos años para acá. El órgano ha sido reemplazado por la banda y los himnarios por presentaciones en Powerpoint. Entonces ¿Que es lo que podemos aprender cuando hacemos una exploración a cómo ha adorado la Iglesia de Jesucristo a lo largo de los siglos? He aquí las respuestas:
Primeramente, el estudio el desarrollo del canto congregacional nos ayuda a apreciar la mano soberana de Dios a lo largo de la historia. A pesar que algunas tradiciones de adoración se han mantenido sin cambios por siglos, muchas de las tradiciones que tenemos en la actualidad tienen su origen en la búsqueda hecha por los cristianos para mejorar los formatos y estilos de adoración heredados de la generaciones anteriores. Hay mucho tiempo invertido en esos controversiales intentos para establecer formas más bíblicas para adorar. Veremos que Dios ha sido siempre fiel para guiar a su pueblo a la verdadera adoración que es en espíritu y en verdad. El estudio de la historia del canto congregacional también nos ayuda a evitar el desbalanceo y las malas reacciones que acontecieron en el pasado. Si vivimos atrapados en solucionar los problemas de nuestros tiempos, podemos perder la perspectiva que pueda brindar una solución conforme a las Escrituras. Un conocimiento del pasado nos ayuda a poner las cosas en un contexto adecuado. Podremos examinar el fruto de esos cambios a largo plazo y detectar tendencias y estilos y ver que tan alineadas están con las Escrituras. También con ello la mayoría de nosotros podemos evitar los errores que han realizado otros al tratar de contarrestar los excesos y abusos que eventualmente se han cometido.
Otro de los beneficios de esta perspectiva a largo plazo, es la humillación que puede producir. Muchos de nosotros estamos expuestos a lo que un escritor ha denominado como “narcisismo temporal”, esto es pretender que todo aquello que tiene más de 30 años es irrelevante y es fastidioso. No debería pasar mucho tiempo antes que notemos que muchos de los que nos han precedidos han sido más elegantes, más humildes y con mayor entusiasmo por las verdades bíblicas que nosotros. En los pasillos de la historia encontramos un antídoto efectivo contra nuestro punto de vista simplista y egoista.
Finalmente, estudiar la historia del canto congregacional puede inspirarnos con respecto al futuro. La mayoría de los escritores de nuestros himnos favoritos no tenían idea alguna de los beneficios que sus obras brindarían con el pasar de los años. Ellos simplemente trataron de ser fieles a las escrituras y a su generación. Por otro lado, cientos de himnos que en un principio parecían contener mucho significado, hoy en día permanecen sepultados en la oscuridad. ¿Qué es lo que hace que un himno no caduque en el tiempo? ¿Cúanto de lo que estamos haciendo hoy durará más que nuestras vidas y será de utilidad para las generaciones venideras?
Creo que las respuestas a estas y otras preguntas serán reveladas en la medida que veamos como el canto congregacional ha evolucionado a lo largo del tiempo. Además con ello descubriremos como hacer que la adoración congregacional de nuestros días sea más bíblica, más efectiva y glorifique mejor a Dios. Espero que todos los lectores se mantengan en esta onda.
Para su gloria
Bob
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