Recién hemos comenzado a ver la relación entre el líder de adoración y su pastor. Podríamos preguntarnos ¿qué debe hacer un líder de adoración para asegurarse que las relaciones fluyan sin roces con el fin de honrar al Señor? Aquí te doy algunos pensamientos al respecto.
Primeramente debes darte cuenta que tu no eres el único líder de adoración. El término líder de adoración ha traido algunas conotaciones a nuestro entorno que no necesariamente son todas de ayuda.
Aunque yo esté dirigiendo el canto en algunos momentos de la reunión, yo no soy el único que alienta a la congregación para que adore a Dios. Esto también es función del pastor. Es más, es el pastor y no el líder de adoración, quien tiene fundamentalmente la responsabilidad de velar por la dirección y la vida de la iglesia. Esta cita de Ron Man al respecto puede brindarnos algo de ayuda:
“El pastor de adoración y de música quizás puede tener el llamado como “pastor de la alabanza congregacional”, y esto lo digo para que no confundamos las cosas, por que la adoración no es meta únicamente de él sino de todo el liderazgo en la iglesia. Los pastores de los niños y de los jóvenes tienen como responsabilidad desarrollar a los más jóvenes para que se conviertan en adoradores. Los pastores de ministerios para adultos deberían buscar que los adultos valoren a Dios y su gloria por encima de todas las cosas, y a adorarle. Los encargados de misiones y evangelismo tienen el ministerio de aumentar los adoradores de Dios. Los predicadores tienen como responsabilidad de acariciar la belleza de Dios y exponerla e invitar a otros a vivir en adoración de todo corazon” (Ron Man, Reformation and Revival Journal, Vol. 9, No. 2, “Worship and the Glory of God”, p. 94)
Sé que la tentación que puede encarar el lider de adoración es creer que el tiempo del canto es “mi tiempo”.” Me ocurre muchas veces que mi pastor me indica que tenemos que acortar el tiempo de adoración y siento una punzada en mi corazón y esto me turba más cuando me lo dicen justo a unos minutos antes de comenzar. Empiezo a sentirme mal y me digo:
“¿Y qué de mis planes, mis arreglos y transicciones?” “Y ¿Qué de tu orgullo?” reponde Dios. Los líderes de adoración sirven bajo autoridad. Un pastor debe sentirse lo suficientemente cómodo para interrumpir o ajustar lo que se hace y al permitirlo no estamos sirviendo a sus prioridades y no las nuestras. Filipense 2:3-4 se nos dice “No hagan nada por egoísmo o vanidad; más bien, con humildad consideren a los demás como superiores a ustedes mismos. Cada uno debe velar no sólo por sus propios intereses sino también por los intereses de los demás”. (NIV)
Incusive Hebreos 13:17 es más específico: “Obedezcan a sus dirigentes y sométanse a ellos, pues cuidan de ustedes como quienes tienen que rendir cuentas. Obedézcanlos a fin de que ellos cumplan su tarea con alegría y sin quejarse, pues el quejarse no les trae ningún provecho” (NIV). En términos de vida real si esto significa acortar el tiempo de adoración, cantar un canto distinto al que preferirías o dejar de cantar un canto que tanto nos gusta.
Otra forma como puedo servir a mi pastor como líder de adoración es darme cuenta que se me ha dado la responsabilidad de guiar a la congregación en adoración con la música durante las reuniones. Por lo tanto un lider de adoración se le puede llamar también “un adorador liderado”. Mi pasión es que la Gloria de Dios se refleje en mi adoración en la forma como me relaciono con los demás, los lugares donde gasto mi dinero y como lo gasto, y en las actividades que decido que deba participar. La adoración es eso “un estilo de vida”.
Para Su Gloria
Bob Kauflin
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