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Los Pastores y los Líderes de Adoración (4a. Parte)

Hemos estado viendo las distintas formas como un líder de adoración puede servir a su pastor. Veamos ahora las distintas maneras como un pastor puede devolver el favor.

Algunos pastores desean dejar en manos de su líder de adoración toda el área de música y adoración. Este es un error muy grave. Dios le ha dado a cada pastor la máxima autoridad para ser un líder de adoración o ser el guía de adoración en su iglesia. Puede que el pastor no sea músico, pero su amor para ver que se proclame la grandeza de Dios debe ser algo de lo cual otros deben aprender de éste y seguir.

Por lo tanto, un pastor debe ser principalmente un adorador de Dios. Nadie debe tener más pasión por la Gloria de Dios que los líderes de la Iglesia de Jesucristo. Una experiencia de la voluntad de Dios en la iglesia no irá más alla de la vida de adoración de su pastor.

Ciertas características destacan en los pastores que son adoradores de Dios. Ellos se preocupan por la reputación que se le dé a Dios más que a la propia. Para ellos la adoración no es simplemente una actividad o un proceso. Es un estilo de vida en el que toda situación es una oportunidad para expresar gratitud al evangelio. A ellos nos les importa si reciben o no créditos, pero si que les importa que el Nombre del Salvador sea levantado en alto.

Un pastor puede servir tanto a su líder de adoración como a su iglesia si dedica el tiempo suficiente para poder seleccionar con mucho cuidado el líder de adoración adecuado. Muchas iglesias tienen “políticas de rotación” de líderes de adoración que en realidad son el resultado de una pobre investigación y planificación. Un pastor debería buscar a alguien que ame la gloria de Dios y que no busque y anteponga el reconocimiento personal. Alguien que quiera conducir la adoración por amor y no tanto por sus talentos. Otras áreas a evaluar es su vida familiar (si es el caso), su fidelidad en el estudio de la Biblia y la oración, y claro está sus talentos de liderazgo. Un líder de adoración debe ser ejemplo a la iglesia. Cuando la gente ve contradicción entre lo que proclaman los miembros del grupo de adoración en frente a la congregación y sus vidas, se pierde la efectividad y peor aun deshonra el nombre de Cristo. Sólo después de se evalúen éstas áreas en el candidato entonces el pastor podría considerar evaluar los talentos musicales.

Una vez seleccionado el líder de adoración adecuado, el pastor deberá tomar la responsabilidad de entrenarlo teológicamente. He aquí un comentario sobrio de John Witoliet:

“Muchos líderes de adoración no pueden mencionar ni siquiera un libro de teología de la adoración. La mayoría de las denominaciones (sorprendentemente) requieren que sus predicadores antes de predicar en sus púlpito hayan aprobado estudios en seminarios reconocidos. Sin embargo el requerimiento para los líderes de adoración es que puedan asistir al ensayo semanal y/o a una reunión de comité. Haríamos mucho bien si retamos a nuestros líderes de adoración a crecer en el conocimiento y el amor de Dios”. (Reformation and Revival, Volume 9, No. 2, “Discerning the Spirits,” p. 19 (cita traducida por entreCristianos))

Un pastor sabio dará acceso a su lider de adoración a la buena lectura y le recomendará libros para leer. Yo mismo me he beneficiado no sólo de la lectura de libros de la adoración sino de temas como la cruz, la santificación, y el Espíritu Santo. También es muy buena idea que el pastor asista a conferencias con su líder de adoración pues ello fomentará la discusión y fortalecerá las relaciones.

Para Su Gloria
Bob Kauflin

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